domingo, 12 de febrero de 2012

Trabajo y cultura afro en la Argentina, de la Subsecretaría de Relaciones Laborales

1. Un día del año pasado el ministro Carlos Tomada se dio cuenta de que decir "trabajo en negro" quedaba mal, y el término se cambió al de trabajo informal o ilegal en los documentos oficiales. Pero además de eso, Tomada decidió promover la organización de una jornada de debate, con académicos y miembros de organizaciones afroargentinas. La jornada estuvo a cargo del Subsecretario de Relaciones Laborales Álvaro Ruiz, y del amigo de todos los estudiantes de Puán, el Doctor Don Huguito 678 Trinchero. Y sí, la jornada se hizo en Puán. Después, Álvaro Ruiz editó parte de la jornada en forma de libro, y yo la leí en un avión por esto de que por motivos ocupacionales tengo que informarme sobre los afros. Las estrellas del índice son probablemente los ministros Tomada, que abre, y Alberto Sileoni, que cierra. Pero además figuran, para alegría de los puanners que leemos este libro por motivos ocupacionales, el amigo Trinchero y la Mgt Marisa Pineau (siempre es un incentivo, cuando nos enfrentamos a una lectura que en principio parece tan árida, encontrar un personaje conocido en el índice, aunque sea UN motivo de semicuriosidad). Contra todo pronóstico, la lectura fue amena, rápida y por momentos divertida.

2. Carlos Tomada es un buen orador, yo lo vi una vez hablando frente a pibes de secundaria acerca del 2001 y a pesar de que enfrentaba un público mayoritariamente hijo de gorilas, logró cautivarlos. Acá habla de lo que decíamos en el punto 1: resulta que la expresión "trabajo en negro" se usa sólo en Argentina: ni en Uruguay existe. Tomada también dice que en la Argentina la idea de libertad "pretendió ser sustituida por la palabra libertad, hermosa palabra también (...) pero todos sabemos que si no hay igualdad en una sociedad, la libertad no es efectiva".

3. A Hugo Trinchero sólo lo vi en la tele, y eso que es el decano de Filosofía y Letras. Dicen que se parece a Mr. Sheffield. En el libro su elocución dura carilla y media. Hace una crítica a La Nación, una chupada de medias al gobierno y no mucho más. Citemos: "Esta es una Facultad de puertas abiertas, una Facultad que quiere colocarse en sintonía con el proyecto nacional y popular..."

4. La primera mesa de la jornada se llama "Del trabajo esclavo al reconocimiento de la ley". Hablan algunos afroargentinos, miembros de la Asociación Misibamba de Merlo, y algunos académicos. Los de Misibamba hacen más que nada un recuento de anécdotas y la justa reivindicación de su existencia. Porque no estamos diciendo lo más importante, y es que la jornada implica una visibilización oficial de los que oficialmente siempre habían sido invisibilizados. Los remito a la reseña de Buenos Aires Negra. Después pasa algo muy gracioso que es que habla la "Mgt en Ciencias Sociales" Liliana Crespi, agradece a Marisa Pineau el que le haya dado el lugar para participar, y se hace un choclo. Confunde trabajo en negro, trabajo informal, trabajo ilegal y trabajo esclavo, cláramente no entiende la diferencia entre el actual trabajo en negro y el actual trabajo forzado o esclavo -por lo menos en el rato que dura su exposición- y bueno, debe haber sido bárbaro estar ahí. Da un poco de pena, debe haber quedado mal. Y al final un tipo Enrique Manson, historiador y kirchnerista por lo que veo en una gugleada, aguijonea al público con lo de que la esclavitud en la Argentina no fue tan grave (pero sin terminar de decirlo).

5. Este panel debe haber estado interesante. "Invisibilización de los negros y construcción histórico social de una Argentina blanca y europea en el siglo XX". Lamentablemente, los editores no desgrabaron las preguntas del público y la parte de los debates. La primera expositora se llama Karina Bidaseca (doctora), claramente feminista, y es la primera del libro en empezar a vomitar apellidos de teóricos. Aníbal Quijano, Wallerstein, Zizek, Bhabha, Fanon, Césaire, Sartre, obviamente Said y sigue. En dos carillas eh. Y después, cuenta las conclusiones de una encuesta: única parte que me gustó y que aporta.

6. Le sigue un señor Lic. Norberto Pablo Cirio, de la Asociación Misibamba. De pronto, después de leer 47 páginas, leo algo inteligente, es decir, un poco más elaborado. "Si contratar fuerza de trabajo o vender mercancía 'en negro' implica, en esencia, evadir impuestos, entonces podemos entender tal accionar como una variante del contrabando (...), no había diferencia existencial entre comerciar bebidas o ganado (...) y negros". Para Cirio, trabajar "en negro" no se refiere a trabajar como un esclavo, sino a trabajar para un contrabandista, por decirlo así. "Considero, en esta evaluación diagnóstica, que la locución adverbial "en negro" está menos vinculada al esclavizado que al esclavócrata, pues nace de la visión hegemónica, blanca, de la institución de la esclavitud en tanto inescrupulosa fuente de riqueza". Me pareció ingenioso.

7. Alejandro Frigerio (http://alejandrofrigerio.blogspot.com) también dice algo muy inteligente. ¿Vieron que la gente que dice "negro de mierda" después dice que no está siendo racista, y después dice cosas como "esos son negros de alma" o cosas así? Frigerio relaciona el tópico del "cabecita negra" con el tema de la invisibilización: "hay un sistema que permite simultáneamente la ilusión de una blanquedad generalizada (...) y que a la vez marginaliza e invisibiliza a quienes no son considerados suficientemente blancos". Y, por si fuera poco, "no todos los 'negros cabeza' son afrodescendientes, pero muchos sí lo son". A mí me parece que el planteo es impecable. De lo mismo hablan Fidel Nadal (afroargentino) y otros en este video.

8. Y el último de la mesa también dice algo interesante. Federico Pita se llama, presidente de la Diafar (Diáspora Africana en la Argentina). Transcribo algunas frases: "Sobrevino la fiebre y se acabaron los negros en la Argentina. Parece una clase de virus que atacaba nada más que a negros, ¿no?"; "...Sarmiento (...) creó nada más y nada menos que el sistema estadístico del país, basándose en sus ideas racistas y llevándolas a la práctica"; "...crearon categorías ficticias como 'trigueño' (...) ¿cuál es la raza trigueña?". Por poco no putea el señor, pero tiene razón. También rebate la idea instalada de que los negros murieron en las guerras: las mujeres negras y los hijos pequeños no fueron a las guerras.

9. Tercer panel: huellas del trabajo esclavo en la Argentina del siglo XXI. Luciano Beccaria presenta una investigación de la UBA en la que participó, sobre talleres textiles clandestinos y su relación con los medios, la discriminación y la emigración. Menciona el caso del taller que se incendió en Caballito, habla de la "bolivianización" de la noticia por los medios: cuando los periodistas simplifican la historia reduciéndola a parámetros ya conocidos (esclavitud) y a sujetos "ajenos" a la colectividad (bolivianos), y bueno, más cosas. La Mgt Marisa Pineau habla de la definición de esclavitud. Nengumbi Celestin Sukama, del CONAFRO, habla un poco de todo y del momento político. Álvaro Ruiz habla del momento político. Y la Dra. Alicia Ruiz dice que la igualdad se organiza a partir de las diferencias.

10. El cierre a cargo de Alberto Sileoni está bueno. Debe ser buen orador, nunca lo vi. Esta buena esta frase: "La escuela debe hacer saber a los chicos y a las chicas desde el nivel inicial que es un extraordinario acto de necedad perderse la riqueza que nos da uno que es diferente a nosotros; es un acto de necedad imposible de repetir (...) Es la misión de una sociedad justa también". Fin. Después hay apéndices ilegibles.

2 comentarios:

ex dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ex dijo...

Es realmente muy bueno este blog sobre el trabajo en negro en nuestro pais. muchas gracias por publicar todo esto.