martes, 31 de mayo de 2022

domingo, 29 de mayo de 2022

Todas nuestras maldiciones se cumplieron, de Tamara Tenenbaum

 1.

Si como dicen algunxs Tamara Tenenbaum está hypeada, es por su propio mérito. Está bien: le suman su juventud (¡es más chica que yo! ergo ya no soy joven, ergo pronto moriré) y las circunstancias de su infancia, que le dan mucha tela para cortar, pero cuántas como ella no son escritoras. Me parece que viene sonando tanto (en el reducido mundo de la gente que lee) porque escribe bien (¿qué significa eso? no sé pero es un hecho) y porque su escritura surfea sin hacerse mucho los rulos entre lo autobiográfico y lo imaginario, la crónica y el cuento. Este libro es lo más cuentístico de ella que leí hasta ahora, después de la notable plaqueta de poesía Reconocimiento de terreno (¿ya les conté que odio la palabra plaqueta?) y el ameno pero olvidable (me gustó pero no sé qué decía) El fin del amor: querer y coger

2.

Los primeros cuentos me resultaron chatos, pero después empieza a jugar con algo que me parece que es la apuesta del libro, el dispositivo o el truco o como quieran llamarlo, que mientras más lo intensifica más me gustó: bajo un título polisémico pero opaco, te empieza a contar una cosa y medio sin que termine te empieza a contar otra, y después otra, y después el cuento termina y en un lugar de la mente del lector esas cosas con ese título se unifican en un aire de familia, pero sin que quede muy claro en qué: a esos relatos fragmentarios no los une un tema evidente sino algo más misterioso. Hay un par de cuentos en los que hay una trama principal que habilita otros relatos más breves: en "Insensatez e imprecisión" es un viaje a Chile con su madre y las amigas de ésta, en "Qué es una familia" es la compra de un departamento: esos son lindos y quizás menos posmo. Pero hay dos re posmo, donde el hilo está escondido, que fueron los más lindos: "Deberías aprender a manejar" y "Qué hay en Panamá". 

viernes, 20 de mayo de 2022

La Madriguera, de Femimutancia

 1.

Uno de los nombres más resonantes de la nueva novela gráfica argentina, Femimutancia (nombre de pluma de Julia Inés Mamone, también llamadx Jules) lleva tres libros publicados en papel por Hotel de las Ideas, uno más lindo que el otro. Y yo tengo todos. Firmado, el fan.

miércoles, 18 de mayo de 2022

La saga de Swamp Thing, de Alan Moore

 1.

Me compré y ahora poseo los seis tomos de La saga de Swamp Thing guionada por Moore, edición argentina, gracias Ovni Press por existir pero bajame los precios un poco. Si Ovni se funde tengo en los libros un reservorio de valor, ojo al piojo. Moore, para los incautos, no es Michael ni Roger, sino más bien el druida y escritor británico también conocido por ser el autor de Watchmen y V de Vendetta, ambas cumbres borrascosas del cómic universal que no fueron debidamente reseñadas en este blog porque no sólo las leí años ha sino que además las leí en PDF (el horror), así que no tenían lomo porque ni siquiera tenían forma física, eran puro concepto, puros bytes, y por ende no hubieran pasado la estricta vara que me permite (y me fuerza) a reseñarlas. Digamos de ellas solamente que Watchmen es insuperable, que la película es sólo un buen intento de adaptarla, y que la película de V de Vendetta lo hace mejor porque la actualiza, la historieta es muy ochentosa y anti tatcher/reaganiana y la peli con guión de las Wachowski la llevaba a algo más dosmilero y en su momento me encantó. Llegará el día en que me compre los libros antedichos: y será más temprano que tarde. Ese día también desembarcarán esos transatlánticos de cuadrinhos en este blog. En fin. Quién me preguntó, ¿no? Y siguiendo con lo que nadie me preguntó porque igual estoy solo en mi casa comiendo chocolate Águila y tomando cafecito, otro libro de Moore que leí pero sí reseñé es From Hell, una adaptación de la historia real de Jack el Destripador y sus víctimas, con un toque de magia lovercraftiana TERRORÍFICA. Altísimo libro que fue debidamente reseñado en estás páginas en 2014. Y ahora, el coso del pantano:

2.

Cuenta la leyenda que La cosa del pantano era una historieta de DC medio de horror medio de superhéroes malditos, que estaba bien pero ta. Apareció en los años '70s, sin pena ni gloria, o por lo menos no con la gloria que alcanzaría bajo el ala del británico Moore, que fue el guionista de la cuestión entre 1983 y 1987, refundando no sólo al personaje y su historia sino también la forma de hacer cómics adultos y de terror, con profundidad y coso. A lo largo de los muchos números que abarca la etapa Moore hay altos y bajos, pero los altos son altísimos. Cuando la Cosa del Pantano muere y reaparece en el espacio creo que se alcanzan los puntos más altos de la cosa, por lo menos para mí. Hay un número famoso que consiste solamente en el garche psicodélico entre Swamp Thing y su novia (que consiste en que ella muerda una fruta que le crece a él, y entren en un viaje místico y orgnásmico conjunto), que también es una locura. Después tiene el problema de DC, que es que para disfrutar en serio de los cómics de DC tenés que haber leído todo y conocer a todos los personajes -hay muchos capítulos que consisten en referencias a otros personajes y títulos, desde un encuentro con Superman muy bueno hasta unos personajes de los '50 que Moore rescata del arcón de los recuerdos- y la otra cuestión es que hacia el final parece que Moore está soltando el mando (porque estaba escribiendo Watchmen a la vez) y se nota. Pero todo está bien, fui feliz y me compraría la remera. Y el muñequito, re. Aguante Moore.

P.D.: A mi padre, con quien comparto mis historietas, le pareció demasiado dark y no quiso seguir. Así que está eso también, para tener en cuenta.

martes, 10 de mayo de 2022

Animales domésticos, de Guillermo Saccomanno

 1.

Después de Bajo bandera, en la misma colección Biblioteca del Sur de editorial Planeta que dirigía Juan Forn a comienzos de los '90s y que amenaza con convertirse en uno de mis fetiches, Saccomanno publicó este libro de cuentos. Los animales domésticos son, claro está, los humanos, como reza el epígrafe a cargo de uno de los pocos filósofos que le dieron la vuelta completa al espectro ideológico, Ernst Jünger: "Toda comodidad debe ser pagada. La condición de animal doméstico arrastra consigo la de bestia de matadero". 

2.

Hay un poco de todo en Animales domésticos: cuentos muy largos que son casi nouvelles ("Deje su mensaje después de la señal" y el que más me gustó, "Hoy es muy lunes"), otros más cortos pero divididos en capítulos, otros cortísimos y que de tan impresionistas son una foto, sin conflicto o sin remate, más bien un clima, un espíritu, como "Las figuritas de Federico", "La Tonina Blanca" o el que da título al tomo. También hay un poco de todo en esa suerte de muestrario humano que ofrece: hombres y mujeres solos o emparejados -o metejoneados-, jóvenes y viejos, gente que se muere o que mata, que se mea y se caga, que se masturba y que coje, que se droga o se escabia, que suda, que cuida, que prende fuego a algo o a alguien. Una muestra más dark que luminosa de la humanidad, aunque haya excepciones. Algunos cuentos envejecieron más o menos, otros muy bien. El cuento que decía que más me gustó podría ser un libro por su cuenta y tiene algo de Arlt (al final, en Parque Lazama, que también tiene algo de Bioy) y algo de Puig (en el relato del relato) y mucho de Saccomanno, y con el tiempo también tiene mucho de documento de época, de archivo histórico de una Buenos Aires que ya no existe más. La descripción de los cines de Lavalle es excepcional y ahora también es testimonial, como lo es la película Sábado a la noche, cine de Ayala o el libro de Cozarinsky Palacios plebeyos. También creo que hay un eco en algunos cuentos como el del contestador con los cuentos que por esa época había publicado el propio Forn en la misma colección, los de Nadar de noche.

3.

Le acabo de encontrar varios errores al índice pero no le digan a nadie.

jueves, 5 de mayo de 2022

Yo soy esta tormenta, de Gael Policano Rossi

1.

Qué hermosooooo

Pero qué hermosooooo

Exclamé solo en mi departamento vacío.

El último poema es para leerlo en voz alta y que se te quiebre la voz.

2.

Cuando fui a la librería a comprarle a Macha la Metodología de la dispersión de Chuca me encontré con este libro de Gael Policano Rossi, rubricado con su alias para la fama virtual Astromostra, lo tarjetié al instante y hace unos días lo vengo leyendo. Mientras lo leía pensaba: GPR está muy arriba, su módica fama no corresponde con su notable talento. Tal vez esto se deba a su versatilidad (como dice la contratapa de Machito): que yo sepa, GPR tiene: dos novelas porno espectaculares publicadas por De parado, un libro con su obra como dramaturgo (que todavía no leí pero ya tengo en cola, y que no sé si es obra completa), este libro de poesía que me voló la peluca (y no sé cuántos más tiene, pero estimo que deben haber otros: por lo menos me consta que existe uno más, que se llama Romain et moi y que yo leí hace casi diez años), y los dos libros de astrología. No debe haber muchos lectores suceptibles a todas estas facetas al mismo tiempo. Yo mismo, que creo que un libro de Gael es un éxito seguro, no me acerqué todavía a su veta de astróloga, creo que porque pienso que no voy a entender nada.

3.

Aunque su talento me parece inobjetable, capaz su tono y temática tan Ciudadano Toto no toque a todx lector de la misma manera. Este no es el libro para regalar a tu mamá. Pero a mí, A MÍ, me interpela jodido. Honra y loor.

4.

El señalador con el que marqué este libro durante su lectura es una carta dorada que me regaló el Timmy, dice "Cosmos", tiene como un simbolito dorado y debajo dice "Oro. ¿Has sentido alguna vez la Fuerza del Universo recorrer hasta la última célula de tu cuerpo? Utiliza el Cosmos para pagar el coste de las distintas cartas de Caballeros del Zodíaco".