viernes, 1 de abril de 2011

Los hermanos Karamázov, de Fiódor Mijáilovich Dostoievski

1. Quién me manda, ¿no?

2. Cuando estaba en la comuna, allá por el verano boreal del año 2005 (alpaim ve jamesh) en Beer Sheva, lo único que podía hacer era sudar, fumar narguila y leer. Me terminé los libros que me había llevado, después leí los que Joni me mandó por correo, y después leí los de Flor y Shirly en castellano y al final terminó la comuna justo cuando estaba por empezar a leer los libros en portugués de los curitibanos. (Creo que esto ya lo conté en otra reseña). La comuna fue una garcha, los curitibanos me odiaban y yo los odiaba a ellos, en dos meses y medio llovió una sola vez y el calor era insoportable, y además yo me encontraba emocionalmente muy perturbado. No sé si viene al caso pero voy a contar una anécdota. El programa en el que estábamos nos permitía irnos de la ciudad un fin de semana cada tanto. Llegó el primer finde que nos podíamos ir. Cada uno de mis socios comunales se fue yendo y a mí me tocó irme último. Creo que pasé el fin de semana en Yerushalaim. Cuando volví el lunes, Dati (léase Dachi) me dijo "¡Alejandro, você não tiró o lixo e agora um rato entró na casa! ¡UM RATO ENTRÓ NA CASA!". Había una rata en el departamento. Los brasileros compraron una trampa y la atraparon. No llegaba a rata, más bien era una simpática lauchita. David y Gabri la querían ahogar en el inodoro, pero los convencimos de que la llevaran a la calle y la soltaran. Después nos mostraron el video que filmaron con la cámara digital. Le habían prendido fuego.

3. Uno de los libros que leí en la comuna fue Los demonios, de Fiódor Mijáilovich Dostoievski, en dos tomos traidos de mi casa y cargados hasta entonces cinco meses en una valija. Los demonios se llama también Los endemoniados o Demonios, dependiendo de la traducción. No podría contar ahora el argumento de la novela, ya no lo recuerdo, pero me quedaron muy marcados un par de personajes, la sensación que me producía la lectura, y una escena en particular, en la que un personaje argumenta ontológicamente por qué el suicidio lo convertiría en Dios. Con ese libro, Dostoievski entró a mi podio (más sobre mi podio en esta reseña, desde el punto 2).

4. Después leí Memorias del subsuelo de vacaciones en Villa Gesell. Cope.

5. Este me lo llevé a las vacaciones que Maia Natasha y sho emprendimos este verano. Increíblemente, lo empecé y hasta terminé el primer tomo estando aún en Uruguay. Cuando me reinserté a la rutina de la vida porteña bajé el ritmo de lectura.Leí la última perorata de Aliosha Karamázov algo así como un mes y medio después de haberlo empezado, en un viaje en el 42, escuchando en los auriculares una pieza de Wagner especialmente seleccionada por el místico orden aleatorio de mi ipod.

6. Los hermanos Karamázov es la última novela que escribió Dostoievski, y tengo miedo de haber leído su mejor novela y ya no poder leer más nada de él. Por ejemplo, temo que Crimen y Castigo sea un embole ahora. Según me dicen es muuuucho más densa que esta, como si agarraramos la parte en que Iván Fiodorovich flashea con la culpa y la hiciéramos novela.

7. Tere me dijo el otro día que ella quería leer de Dostoievski "esa novela, la del parricidio". Es esta. Freud escribió Dostoievski y el parricidio. Yo sin embargo, mientras la leía, no la pensé como una novela sobre el parricidio específicamente. Más bien me pareció una novela sobre el ateismo y la religión (cristiana). Es sin duda la novela más cristiana que leí en mi vida (y la mejor novela cristiana también). En wikipedia dice que le gusta al papa Mazinger Benedicto XVI.

8. Sinopsis: Rusia SXIX, Fiódor Pavlovich Karamazov tiene tres hijos (más uno ilegítimo) pero no les da pelota y es malo y lujurioso y un zangano aristócrata. Sus hijos crecen y por distintos motivos se reúnen en el pueblo donde vive el padre. Dimitri es el mayor y tiene una carácter de mierda. Ivan es ateo. Aliosha es aprendiz de monje en el monasterio local y tiene un ídolo, el staret Zosima. El hijo ilegítimo vive en la casa del padre como cocinero. Se llama Smerdiakov (algo así como mierdoso). Dimitri y Fiodor aman a la misma mina. Dimitri está comprometido con otra mina a su vez, que es la mina a la que ama Iván. Aliosha tiene una relación pedofílico-casta con una niña paralítica. Alguien mata a Fiódor Pavlovich. Se enjuicia a Dimitri, pero no sabemos si fue él o en cambio fue Smérdiakov -y este, a su vez, si fue, no sabemos si tuvo la venia de Iván o no la tuvo-. En paralelo, varias historias: muere el staret Zosima pero antes de morir lo expulsa a Aliosha del monasterio, le dice que tiene que vivir en la sociedad abierta porque es su destino. Un hombre ultrajado por Dimitri tiene un hijo moribundo -y una mujer loca, una hija paralítica y una hija mala onda-. Y también está la historia de Kolia Krasotkin, un niño socialista; la de Ivan y sus alucinaciones con el demonio; la vida del staret Zosima antes de volverse monje; el libro que escribe Aliosha sobre las prédicas de Zosima (es un embole)...

9. La novela se divide en doce libros y en mi edición tiene dos tomos y mil y pico de páginas. Mi libro favorito fue "Los niños", protagonizado por Kolia Krasotkin y casi sin relación con la historia de los hermanos Karamazov. Y bueno, eso fue Los hermanos Karamázov de Fiódor Mijáilovich Dostoievski para Super Nintendo y espero que les haya gustado.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Creo detectar un cierto menosprecio hacia Los Hermanos Karamázov? Por lo menos, eso es lo que parece que sientas por esa novela cuando hablas de "la perorata de Alioixa" o de su relación "pedofílico-casta con la niña paralítica (la niña tiene un nombre, Lisa!!)". Bueno, prefiero suponer que está escrito en plan comedia.
Por si aún no te has leído Crimen y Castigo, te recomiendo que lo hagas. Yo leí esta primero y, como tú, temía que fuera su mejor novela y que las otras me decepcionaran. Pero no ha sido así. En cierto modo, aún no puedo decidir cual de las dos novelas es mejor. Yo no creo que Crimen y Castigo sea más densa; al contrario, es mucho menos "pesada", por decirlo de algún modo.
Y a mi también me gustó mucho el libro "Los niños". El carácter de ese personaje, Kòlia, me fascinó por su parecido a cierta gente de mi colegio.
En fin, insisto en qué leas Crimen y Castigo si aún no lo has hecho y que sigas leyendo a Dostoievski, pues es un gran maestro de la literatura y la vida en general.

Ale Schonfeld dijo...

Hola Ery. No hay menosprecio, son chistes. Dostoievski es uno de los cuatro más capos del mundo. Gracias por el consejo, lo tendré en cuenta. Saludos, y gracias por leer el blog.

Tu vieja dijo...

Estas yo noto cada vez más que son cuestiones culturales. Viajás pero escribís bien argento, y algunas sutilezas se escapan a mentes foráneas. No te das una idea de lo que disfruto tu blog. Seguí. Hacele un favor al mundo y seguí leyendo.

Ale Schonfeld dijo...

¡Mierda! (de gusto). ¡Gracias, tu vieja!